Vivimos engañaos.Y viendo que cualquier cosita que ponga hoy puede llevar este titulo, me he permitido el lujo de crearlo como etiqueta y ahora os voy a contar de lo que me enteré ayer.
Es bien sabido por todos que el rey Juan Carlos es motero y en sus salidas nocturnas recoge autoestopistas y se los lleva a bares de alterne. Pues bien,no hace mucho se encontró con la chica de la curva,que se llamaba Verónica Verónica Verónica.Al instante la reconoció como la chica del programa sorpresa sorpresa,si,la de la mermelada.Después de preguntarle por Ricki Martin iniciaron una larga conversación.
Ya estaba amaneciendo cuando atravesaban las tortuosas carreteras que la chica indicaba al monarca.Entonces vislumbraron una de las curvas y la chavala quiso advertir al conductor para que tuviese cuidado.
Pasaron la curva sin más dificultades y Verónica Verónica Verónica se quiso explicar:le contó como se habian matado allí ella y su novio.Después de tan desafortunado accidente ella decidió quedarse cual fantasma para avisar de los peligros a otros conductores.Al parecer su novio no estaba por la labor de ayudarla en tan generosa misión porque tenía preparada una crionización con el mismisimo Walt Disney. (vamos que el tío se cagó cuando les dieron las largas los de la banda sangre,y eso que ya estaba muerto)
El rey, viendo que tenía que trabajar al día siguiente, decidió irse a casa ,vamos, a palacio. Aún así le prometió a Verónica Verónica Verónica que avisaría a la DGT y al ministerio de obras públicas para que señalizaran la curvita de las narices.Viendo que su cometido en la vida habia terminado y no sin agradecer infinitamente al rey su idea,Verónica Verónica Verónica pudo ir hacia la luz.
Es bien sabido por todos que el rey Juan Carlos es motero y en sus salidas nocturnas recoge autoestopistas y se los lleva a bares de alterne. Pues bien,no hace mucho se encontró con la chica de la curva,que se llamaba Verónica Verónica Verónica.Al instante la reconoció como la chica del programa sorpresa sorpresa,si,la de la mermelada.Después de preguntarle por Ricki Martin iniciaron una larga conversación.
Ya estaba amaneciendo cuando atravesaban las tortuosas carreteras que la chica indicaba al monarca.Entonces vislumbraron una de las curvas y la chavala quiso advertir al conductor para que tuviese cuidado.
Pasaron la curva sin más dificultades y Verónica Verónica Verónica se quiso explicar:le contó como se habian matado allí ella y su novio.Después de tan desafortunado accidente ella decidió quedarse cual fantasma para avisar de los peligros a otros conductores.Al parecer su novio no estaba por la labor de ayudarla en tan generosa misión porque tenía preparada una crionización con el mismisimo Walt Disney. (vamos que el tío se cagó cuando les dieron las largas los de la banda sangre,y eso que ya estaba muerto)
El rey, viendo que tenía que trabajar al día siguiente, decidió irse a casa ,vamos, a palacio. Aún así le prometió a Verónica Verónica Verónica que avisaría a la DGT y al ministerio de obras públicas para que señalizaran la curvita de las narices.Viendo que su cometido en la vida habia terminado y no sin agradecer infinitamente al rey su idea,Verónica Verónica Verónica pudo ir hacia la luz.
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